Epicondilitis o codo de tenista
La epicondilitis lateral, epicondilitis (epicondilalgia) o "codo de tenista" es una de las tendinitis más frecuentes en el paciente sea o no deportista. Se denomina así, porque el relieve óseo del radio en la parte externa del antebrazo se llama epicóndilo.Descripción de la epicondilitis
Se debe a una entesitis o inflamación de los tendones de la musculatura del antebrazo que se insertan en el epicóndilo, por uso excesivo, movimientos repetitivos, traumatismos directos o desequilibrio de fuerzas entre esta musculatura y la antagonista (pronadores). Estos movimientos repetitivos causan microrroturas fibrilares y provocan la reparación inadecuada de estos tejidos.
Es importante el tratamiento de estas lesiones para evitar su cronificación, entonces no hablaremos de tendinitis sino de tendinosis.
Se da sobretodo en deportes con raqueta como el tenis y el pádel. También la encontramos en trabajos con movimientos repetitivos como pintores, camareros, trabajos en cadena, etc…
Posibles causas
Compromiso o afectación del nervio radial (C5, C6, C7, C8 y T1) en cualquier punto del trayecto que discurre desde las vértebras cervicales hasta la mano o una disfunción vertebral en las últimas 3 vértebras cervicales (C5, C6, C7) y primeras vértebras dorsales puede provocar epicondilalgias porque el nervio radial inerva esta musculatura y por inervación del esclerotoma (hueso) del epicóndilo por parte de C8.
Síntomas
Estos músculos epicondíleos (músculo extensor radial corto del carpo o 2º radial, músculo extensor común de los dedos, músculo extensor propio del meñique, músculo extensor cubital del carpo o cubital posterior y músculo supinador corto) se encargan de la extensión de muñeca y dedos, y de la supinación del antebrazo (llevar palma hacia arriba). Asociado a esta patología, se produce un dolor constante en la cara externa del codo, nocturno, en reposo, que aumenta la llevar peso y a la presión sobre la zona, relacionado con la contracción muscular de dicha musculatura (en movimientos del revés, o extensión del codo y supinación), generando impotencia funcional en actividades de la vida diaria, en el trabajo y a la hora de realizar deporte.
Más información sobre la epicondilitis
Se debe a una entesitis o inflamación de los tendones de la musculatura del antebrazo que se insertan en el epicóndilo, por uso excesivo, movimientos repetitivos, traumatismos directos o desequilibrio de fuerzas entre esta musculatura y la antagonista (pronadores). Estos movimientos repetitivos causan microrroturas fibrilares y provocan la reparación inadecuada de estos tejidos.
Es importante el tratamiento de estas lesiones para evitar su cronificación, entonces no hablaremos de tendinitis sino de tendinosis.