Fisioterapia para el síndrome subacromial
El síndrome subacromial (también conocido como de impactación o pinzamiento), es la disminución del espacio existente entre el acromion y la cabeza humeral en la articulación glenohumeral. Se produce por tanto, un aumento de la fricción y el desgaste sobre los tendones que pasan por este espacio (supraespinoso e infraespinoso) por diferentes motivos.Tratamiento fisioterápico para el síndrome subacromial
Recuperación de la estructura afectada
El objetivo inicial en el tratamiento del síndrome subacromial es una recuperación estructural. La base de dicho proceso consiste en ir ganando el espacio reducido, provocando una normalización de la articulación y de la musculatura y demás estructuras capsulo-ligamentosas implicadas, con el objetivo de ir resolviendo el cuadro clínico, mediante la exposición progresiva de estrés del tejido para dicho fin.
Todo esto persigue la readaptación funcional analítica, a fin de que esa estructura afectada por el síndrome pueda ir recuperando su función de forma aislada; al mismo tiempo, se trabaja sobre la recuperación de la estructuras adyacentes de esa cadena funcional hacia su reeducación.
Readaptación funcional
A continuación, se profundiza en protocolos de readaptación funcional, para que en el conjunto de todas las estructuras afectadas por la inicial exista un patrón de reeducación de la función.
Readaptación a la vida diaria
Por último, sería la readaptación a gestos biomecánicos de la situación pre-lesión, según el contexto de la , por ejemplo:
- Ámbito deportivo: sería simular un gesto técnico concreto en situaciones de control, y luego añadiendo incertidumbre que dificulten el gesto, para una posterior incorporación parcial al deporte concreto hasta la reincorporación completa.
- Ámbito laboral en cadena de montaje: igualmente, reproducir las acciones a desarrollar con parámetros menos marcados, como tiempos de ejecución, repeticiones, pesos de objetos, etc, para posteriormente ir regulando esos parámetros hasta la incorporación total a la jornada laboral.
Desde un primer momento, a nuestros pacientes se les elabora un planning preciso de recuperación funcional (basado en un programa de cinesiterapia), el cual deberá cumplir; este programa es incluso más importante que la propia visita que pueda hacer a nuestro centro con el fisioterapeuta. Diariamente, el paciente dispondrá de dicho programa en el cual se indicarán los ejercicios y todos los parámetros que lo justifiquen, de forma muy detallada.
Posibles causas
Entre las más frecuentes se encuentra: la presencia de una deformación del acromion (pico), caídas o traumatismos sobre el brazo que producen que la cabeza humeral suba y disminuya el espacio debajo del acromion. Otra posible causa puede ser un contexto de artrosis.
Síntomas
La sintomatología no comienza de repente, sino que es un cuadro clínico insidioso, progresivo y mecánico. Los síntomas principales son el dolor sordo, difuso y continuo por la cara lateral del hombro hasta el codo, dolor que aumenta la coger pesos y en la elevación, separación y rotaciones del hombro (abrocharse el sujetador, rascarse la espalda, peinarse), que aumenta por la noche o en reposo, pérdida de fuerza y debilidad muscular. También puede existir sobrecarga compensatoria en la musculatura cervical con presencia de puntos gatillo en deltoides o trapecios, imposibilidad de realizar actividades de la vida diaria o actividades deportivas (el saque en el tenis, por ejemplo).
Más información del síndrome subacromial
Este síndrome subacromial no sólo provoca el desgaste y la inflamación del tendón del supraespinoso, sino de todos elementos que pasan por él como de otros tendones del manguito rotador, provocando inicialmente una tendinitis de dicho manguito con edema e inflamación, o la bursa subacromial (bursitis subacromial). Después, suele formarse una fibrosis y engrosamiento del tendón y, por último, una rotura del manguito rotador.
Comentar que es importante un buen diagnóstico diferencial, dentro de un contexto de dolor del hombro, que pueda significar otras patologías: por ejemplo, una alteración o disfunción del estómago o del hígado puede ocasionar un dolor referido de origen visceral en el hombro.